Ciertamente en el periodismo peruano todos están con rabo de paja. Algunos mas y otros menos.
Nunca voy a olvidar a Hildebrandt, cuando entrevisto en su programa a un tipo que decía que Lima iba a desaparecer. Mientras Alejandro Toledo, recibia a los presidentes latinoamericanos en Cuzco. El de Cabana, era recibido por una población hostil en el comienzo de su mandato.
A mi siempre me olio a “cortina de humo”. Y es verdad, que hábilmente Cesar Hildebrandt, puso antes el “parche” pues le dijo al que predicaba el fin de Lima que se exponía al “ridículo”… y si que lo hizo.
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2 comentarios:
Le dolió a Thorndike jr. que recordaran las porquerías que hacía su viejo. A llorar al río, chochera.
El título del post es muy pertinente, no se puede confiar en nadie, pero tampoco podemos desconfiar de todos. Lo más sano es tratar de cruzar la información.
lo cagò, los jovenes se estan tumbando al ultimo totem.
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