Perú: Empresas privadas espían para servicios de Inteligencia

Hace mucho tiempo se comentaba que había empresas dedicadas al espionaje telefónico. Supongo que debe ser una práctica habitual en el mundo comercial donde los capitales no pueden dejar en algo tan simple como la buena fe sellen compromisos entre partes.

Las empresas dedicadas nunca dicen abiertamente que se dedican a ello. Seria un total despropósito pues la Constitución (el libro mas violado del Perú) consagra el secreto de las comunicaciones.

Lo más interesante de todo es que el Perú debe ser el primer país en el mundo en haber hecho uso de empresas privadas para proveer informaciones sobre escuchas telefónicas a favor de los servicios de inteligencia.

¿A que se debería esto?  Puesto a que en los últimos años (desde tiempos de Fujimori hasta Toledo) los servicios de inteligencia eran puestos en el ojo de la opinión publica pues sus integrantes eran descubiertos en las faenas. Espía descubierto es espía muerto.  El grado de ineptitud fue tan grande que algún “iluminado” realmente dio el atrevido paso de hacer cumplir al pie de la letra el texto Constitucional y dio de baja a los equipos. Ante este panorama se han tenido que dar partidas para que empresas privadas trabajen como espías a favor del gobierno.

Todos los países del mundo realizan espionaje telefónico y seguimiento a personas claves. El problema peruano es que son tan incapaces que se dejan descubrir.

Muchos considerarían que el texto anterior es  digno de un cuento mal hecho. Sin embargo EL COMERCIO nos da la noticia de la siguiente forma:

Servicios de inteligencia contratan empresas para rastrear llamadas

8:51 | El objetivo es buscar narcos, pero Congreso indagará qué empresas son y qué 'chuponean'

Por Ítalo Sifuentes Alemán

La comisión que investiga el 'chuponeo' contra empresarios y políticos como supuesta actividad recurrente en el país pedirá en los próximos días a los jefes de los servicios de inteligencia militares y policiales que expliquen en qué casos contratan a diversas empresas privadas que brindan legalmente el servicio de rastreo de llamadas telefónicas en diversas regiones del país .

Dicha comisión, presidida por el congresista Oswaldo Luizar (Bloque Popular), llevará a cabo tal pesquisa en tanto la comisión de Inteligencia del Congreso, que preside Mauricio Mulder (Apra), le informó que algunos mandos de los servicios de inteligencia reconocieron que tercerizaban dicho servicio porque no cuentan con la tecnología para realizar el rastreo de llamadas telefónicas cuando así lo solicitaba el Poder Judicial.

Fuentes de la Comisión de Inteligencia del Congreso señalaron que, efectivamente, varios funcionarios de la Dirección de Inteligencia Nacional (DINI) y de los servicios militares y policiales señalaron que la contratación de las empresas de seguridad privadas para rastreo de llamadas se realiza durante la investigación de casos de narcotráfico y secuestro autorizada por las autoridades judiciales como parte de los procesos que estas dirigen.

Según explicaron a este Diario en la Comisión de Inteligencia, la autorización judicial para el rastreo de llamadas consiste solo en conocer desde qué número telefónico, lugar y frecuencia se comunican las personas que integran o se sospecha que pertenecen a las bandas de narcotraficantes y secuestradores que operan en el país.

La investigación dirigida por Luizar buscará determinar si además de conseguir la información encomendada las empresas privadas 'chuponeaban' el contenido de las conversaciones que fluían en los números telefónicos autorizados y si en el camino interceptaban las llamadas de personas que nada tenían que ver con el delito investigado por la vía judicial.

Consultados al respecto, tanto Luizar como Mulder indicaron que las investigaciones se conducen de manera reservada.

Entregan resultado de investigaciones
La Comisión de Inteligencia entregó al grupo de trabajo, que preside el congresista Oswaldo Luizar, el resultado de las investigaciones que realizó respecto al 'chuponeo' en los últimos meses a diversos periodistas.