Desde México nos enteramos de la posición del Perú con referencia a las elecciones en Honduras, sin la restitución del presidente legitimo Zelaya:
Estados Unidos (junto con Canadá, Bahamas, Costa Rica y Perú) se abstiene de suscribir el proyecto de declaración en un punto especialmente importante: la posible legitimidad del gobierno que surja de las próximas elecciones, si se producen sin que el depuesto presidente Manuel Zelaya sea restituido.
Esto quiere decir que la posición peruana, por un gobierno irresponsable, torpe, servil y abyecta queda una vez más al descubierto en complicidad con su socio Estados Unidos. Llama la atención del “intermediario” Costa Rica, que tuvo protagonismo al hacer creer que queria restituir en sus funciones a Zelaya, cuando lo real daba mayores largas al asunto para tratar de legalidad al golpista Micheletti.
El resultado de esta política es legitimar posiciones fuera de tratados y leyes que en Perú deberíamos rechazar. La importancia de condenar y no dejar pasar golpes de estado en el ámbito de la OEA es para que nunca más vuelvan a repetirse en nuestra región.
La información es recogida de LA JORNADA: ¿Por qué no cae Micheletti?
2 comentarios:
A mi me parece bien
Mas si Canada y Costa Rica también estan de acuerdo
Lo mejor que se puede hacer, dado el entrampamiento, es que las
elecciones de noviembre definan la situacion
El partido de Zelaya tiene candidato y participa
Ahh... me olvidaba, Zelaya es un transfuga y ya habia mandado al cacho a su partido por jugar la opcion chavista ... su problema !!!
Esa es la solucion. Elecciones libres y que el pueblo hondureno decida. No hay razon para oponerse si se realiza con fuerzas de paz internacionales y el control por parte de organizaciones internacionales
Quien se oponga a esta solucion, actua como la madre falsa de la historia del Rey Salomon. Como no puede apropiarse del ninho ajeno, entonces que lo revienten nomas
Saludos solidarios con el pueblo hondureno
Dario Enriquez
Montreal, Canada
Lo ideal sería la restitución porque, a mi juicio Zelaya fue inconstitucionalmente destituido.
Ahora bien, los partidarios de los golpistas, aducen infracciones constitucionales que no carecen de asidero, ni son descabelladas ni cerriles desde su perspectiva. Sin embargo considero que la arrogación del gobierno hondureño por los golpistas es antijurídico a partir del concepto del Poder Constituyente como expresión de la soberanía que radica en el pueblo.
Dicho esto, es menester considerar que la realidad jurídica a veces es distinta a la realidad política. En ese orden de ideas es innegable la polarización del pueblo hondureño, y la existencia de un riesgo latente de guerra civil nefasta para ellos.
En aras de salvaguardar la paz, las elecciones democráticas albergarían un posibilidad interesante para retomar los caudales de armonía en el país centroamericano. Claro, que para eso debe existir la garantía de llevar a cabo unas elecciones libre de toda influencia oficialista.
Después de todo, a Zelaya le quedaba poco para cumplir su mandato, y en medio de la situación ilegitima actual, unas elecciones libres podría atenuar la convulsión social.
Saludos
Publicar un comentario